Tonalidades de colores excepcionales que se logran gracias a una destreza en la ejecución particularmente refinada y precisa, que da nueva vida a la antigua forma de trabajar el cristal, en estas piezas únicas que nacen de la colaboración artística entre Enzo Catellani y Giuliano Gaigher.
Instalación a cargo de Matteo Petrucci
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